¿Por qué cuesta lo mismo ver en el cine
Django que ver
El callejón? ¿Cuántas personas están dispuestas a pagar 9 euros por ver
Django en el cine y cuántas personas están dispuestas a pagarlos por ver
El callejón? ¿La demanda de una y de otra película es la misma? ¿Cuántas entradas de 9 euros se tienen que vender para rentabilizar
El callejón? ¿Iría más gente a verla si la entrada costase 5 euros? ¿4 euros? ¿3 euros? ¿2,50? ¿Hay alguna ley que impida a los cines (o a las productoras, no sé) rebajar la entrada?
Sócrates lo habría hecho mejor pero, bueno, yo pregunto.
¿Por qué el precio de los cubalibres depende de la ciudad o zona de la ciudad donde los sirven? ¿Por qué influye más el interiorismo del bar o el estilismo de las camareras que la calidad del hielo? ¿Por qué te invitan antes a un cubalibre que al cine?
ReplyDeleteMe recuerda al experimento de Radiohead con su último disco, el que colgaron en la red pidiendo la voluntad. Pues igual que los discos malos cuestan igual que los buenos pasa con las películas. Seguro que la crisis de los sectores audiovisuales ha sobrevenido de tantos discos y películas buenos.
DeleteNo he comparado "Django" con "El callejón" por una cuestión de calidad (no he visto "El callejón") sino por su potencial comercial. Está claro que "El callejón" tiene un público potencial mucho menor que "Django". Igual es buenísima, pero sobre el papel su atractivo es inferior.
DeleteAlgunas empresas, para incrementar el atractivo de un producto que se vende poco o que se empieza a vender menos, optan por bajar el precio. En España se siguen haciendo películas que no ve casi nadie en los cines y, sin embargo, los precios no se tocan. Tiene que haber un motivo para que esta situación se mantenga así. Yo no tengo mucha idea de cómo funciona el negocio de la exhibición pero algo me dice que las subvenciones juegan un papel importante. Me da la sensación de que para rentabilizar una película española el objetivo no es tanto conseguir muchos espectadores como conseguir una subvención.
Si nos pasamos al mundo de la música, es cierto que los discos malos y los buenos cuestan lo mismo. Pero no costaban lo mismo los discos (o cassettes) que se vendían en las gasolinearas y los que se vendían en El Corte Inglés. Y no era sólo por una cuestión de calidad de la música.
En resumen, si quieres vender al Junco, empieza vendiéndolo a precio de gasolinera; cuando se haga tan conocido como el Fary ya lo venderás a precios de El Corte Inglés. Ejemplo: Camela.
Murciana, siento decírtelo pero hay chicas a las que invitas a un roncola y otras a las que invitas al cine. Con las segundas sueles estar casado.
ReplyDeleteComo no he estado casada, no sé esas cosas. Y así nos va.
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