04 May 2013

Saqueando blogs: Mars on life

España no es país para niños. Mucho Joselito, mucho Pablito Calvo, mucha Marisol... Pero ¿dónde está nuestro Dr. Seuss, nuestro Gianni Rodari, nuestro Michael Ende, nuestro Roald Dahl?

¿Cúal es nuestro gran clásico de la literatura infantil del S.XX? ¿Platero y yo? ¿Marcelino pan y vino? ¿Fray Perico y su borrico?... ¡Puaj! 

¿Gloria Fuertes? Bueno, por ahí vamos mejor pero, qué quieren que les diga, no la veo muy consistente como narradora. Y sé de lo que hablo. De pequeño me leí varias veces Pío Pío Lope, el pollito miope.


Roald Dahl. 

Uno de mis hitos como lector fue el descubrimiento de La medicina de Jorge. Literatura que hacía cosquillas. Y después Las brujas, uno de los libros más difíciles de conseguir en la biblioteca de mi colegio (así de intenso era el boca a boca). Todavía recuerdo el momento en que empecé a leerlo. Nunca nadie me había hablado así desde las primeras páginas de un libro. Temblaba de placer. Roald Dahl, el Hitchcock de la literatura infantil.

Probemos a leer el comienzo de Matilda:
"Ocurre una cosa graciosa con las madres y los padres. Aunque su hijo sea el ser más repugnante que uno pueda imaginarse, creen que es maravilloso. 
Algunos padres van aún más lejos. Su adoración llega a cegarlos y están convencidos de que su vástago tiene cualidades de genio. 
Bueno, no hay nada malo en ello. La gente es así. Sólo cuando los padres empiezan a hablarnos de las maravillas de su descendencia es cuando gritamos: «¡Tráiganme una palangana! ¡Voy a vomitar!»."
Funciona. De hecho, funciona bastante mejor que la mayoría de los relatos que el propio Dahl escribió para adultos.

Y ahora, el saqueo. A la autora del blog Mars on life también le gusta Roald Dahl. Le gusta tanto que incluso ha ido a Great Misseden (U.K.) a ver (por fuera) la casa del escritor y a visitar (por dentro) el museo que le han dedicado en el pueblo. Ella misma lo cuenta.  Un relato curioso. Curioso como un niño.

5 comments:

  1. Yo perdí la cuenta de las veces que leí Matilda.
    Es cierto que no recuerdo ninguna buena novela española. Recuerdo los de El pequeño Nicolás, Nacida en Domingo y Los secuestradores de burros. Todos me los daban mis padres, con un extraño buen criterio ya que ninguno es experto en literatura y menos en infantil.
    De Gloria Fuertes leí Coleta la Poeta. Y me gustaba mucho. De todos modos yo de chica era más de verso y de Astérix.

    ReplyDelete
  2. En mi casa somos muy de Astérix también (y muy poco, o casi nada, de Tintín). Mi madre nos fue regalando todos los números hasta completar la colección. También teníamos todos los libros del pequeño Nicolás (Mamerto, menudo idiota). Pero a Dahl lo descubrí en el colegio.

    ReplyDelete
  3. Por favor, ¡qué arte tiene Mr. Dahl! ¡La de veces que habré pensado eso mismo que citas! Yo de pequeño lo poco que recuerdo haber leído eran las aventuras de Los Cinco de la Blyton, supongo que por aquello de que podías siempre identificarte con alguno de los personajes (bueno con el perro no, ¿o sí?)

    ReplyDelete
  4. De Los Cinco sólo me leí un libro que andaba perdido por casa (se lo habían regalado a mi hermano mayor por la Primera Comunión), pero recuerdo que los personajes femeninos estaban mejor caracterizados (la chicazo vs. la dulce). El perro tenía su carisma también.

    Del subgénero "pandillas de chavales que resuelven misterios" mis favoritos, sin duda, eran Los Tres Investigadores.

    ReplyDelete