La llevaba tan incrustada en la conciencia, que, al parecer, me pasé el primer año de colegio convencido de que todas y cada una de mis profesoras eran mi madre disfrazada. Echaba a correr en cuanto sonaba el timbre de salida, e iba todo el camino preguntándome si llegaría a casa con tiempo para pillar a mi madre antes de que volviera a transformarse. Pero siempre, invariablemente, la encontraba ya en la cocina, poniéndome el vaso de leche con galletas.
El mal de Portnoy, PHILIP ROTH
[Traducción de Ramón Buenaventura]
BRAVO
ReplyDelete(Como la revista para adolescentes.)
Delete¿Sigue existiendo la Bravo?, ¿y el Nuevo Vale? Ay, qué mayor soy.
DeleteNi idea. El último input sobre revistas teen que hay en mi cerebro es de hace muchos años, cuando en un quiosco vi por casualidad una revista que se llamaba Loka (así, con K) y me di cuenta de que el esplendor en mi hierba se había apagado para siempre.
DeleteGrandísima novela, de lo mejor de Philip Roth en mi opinión.
ReplyDeleteEs la única que he leído de Roth (por el momento), así que no puedo compararla con las demás, pero recuerdo que me gustó mucho.
DeleteAcepto consejos sobre cuáles son los mejores títulos para seguir con el autor.
Pues te recomiendo su trilogía americana: Pastoral americana, Me casé con un comunista y La mancha humana. Hay una edición en Galaxia Gutenberg que recoge las tres.
Delete¡Gracias! Me lo apunto.
DeleteUn grande Philip. Tengo un par por casa pendientes.
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